lunes, 7 de abril de 2008

Miércoles, 23 de febrero de 1944.


Desde Ayer Hace Buen Tiempo, Y Me Siento Completamente Cambiada. Cada Mañana Voy Al Granero Donde Trabaja Peter Y Donde El Aire De Afuera Refresca Mis Pulmones Saturados De Moho. Desde Mi Sitio Preferido En El Suelo Miro El Cielo Azul, El Castaño Aun Desnudo, En Cuyas Ramas Brillan Las Gotitas, Las Gaviotas Y Los Otros Pájaros Plateados Que Cortan El Aire Con Su Vuelo Rápido.
Él Había Apoyado La Cabeza Contra La Gruesa Viga. Yo Estaba Sentada. Respirábamos Juntos El Aire Fresco, Mirábamos Afuera, Y Entre Nosotros Había Algo Que No Había Que Interrumpir Con Palabras. Por Largo Rato, Nos Quedamos Mirando El Cielo, Los Dos; Y Cuando Tuvo Que Dejarme Para Ir A Cortar Leña, Yo Sabía Que Él Era Magnifico. Subió La Escalera, Seguido De Mi, Y Durante El Cuarto De Hora Que Corto La Leña No Cambiamos Una Palabra. Yo Permanecía De Pie, Para Mirarle; El Se Aplicaba En Corta Bien La Leña, Para Demostrarme Su Fuerza. Yo También Mire Por La Ventana Abierta, Tras La Cual Se Divisaba Una Gran Parte De Ámsterdam; Se Ve Por Sobre Los Techos, Hasta La Línea Del Horizonte, De Un Azul Tan Límpido Que Ya No Se Distingue .Me Dije “Mientras Esto Exista Y Que Yo Pueda Ser Sensible A Ello – Este Sol Radiante, Este Cielo Sin Nubes-, No Puedo Estar Triste”.

Para El Que Tiene Miedo, Que Se Siente Solo O Desdichado, El Mejor Remedio Es El De Salir Al Aire Libre, Y Buscar Un Lugar Aislado Donde Estará En Comunión Con El Cielo, Con La Naturaleza Y Con Dios. Únicamente Entonces Se Siente Que Todo Estará Bien Así, Y Que Dios Quiere Ver A Los Hombres Felices En La Naturaleza, Simple, Pero Bella. Mientras Esto Exista, E Indudablemente Será Siempre Así, Estoy Segura De Que Todo Pesar Hallara Su Consuelo Fueran Cuales Fueren Las Circunstancias. Este Instante De Dicha Suprema, Quizá No Tenga Yo Que Esperar Mucho Tiempo Para Compartirlo Con Aquel Que Lo Haya Vivido Como Yo.



Fragmento extraído del libro “EL DIARIO DE ANA FRANK”

No hay comentarios: